viernes, 26 de marzo de 2021

Gloria Cuenca: Las comunas y el gran salto atrás (I y II)

 


 

Sospecho en efecto, que soy una de las pocas personas vivas,  en Venezuela, que tuvo, el ¿privilegio? de visitar una comuna popular, en la China de Mao Tse Tung en 1976. Fue un privilegio, por cuanto ahora puedo, contradictorios lectores, hablar con propiedad de lo que el grupete de ignorantes y desaforados revolucionarios pretenden establecer en nuestro maltratado y arruinado país. No les bastó, por lo que se observa, que en el 2007 fueran ampliamente derrotados, aún con el innombrable vivo, en el referéndum convocado para establecer el comunismo, a la cubana, en Venezuela. Les cuento. Mi padre Humberto Cuenca había visitado China en 1959, época de la Nueva Democracia, y había visto el lanzamiento del Gran salto Adelante, (que denomino, sin ningún temor: gran salto atrás) lo principal era transformar a China en comunista, haciendo las comunas y transformándola por la fuerza en potencia industrial.  Obligaron a todo el mundo a derretir, sí como lo leen, derretir todo metal, a fin de lograr hacer una industria pesada capaz de competir con la URSS y los USA.   Ambos propósitos fracasaron. Al decretar las comunas se produjo una hambruna en la que los chinos para salvar la vida de los niños y jóvenes, se transformaron en antropófagos; hay documentales de abuelos cortándose la piernas para dar de comer a los nietos pequeños. No es amarillismo. Esto ocurrió y hay documentación al respecto.  Las comunas se decretaron en 1959 y fueron eliminadas 17 años después, apenas ocurrió la muerte de Mao.(Septiembre de 1986) Para salvación del pueblo de China: que empezó a comer un tazón de arroz, rebosado con una salsa de mariscos, de cochino o de pollo, (a ellos no les gusta mucho la carne roja) y una taza de te caliente, Esto para los mil quinientos millones de personas que conformaban ese inmenso país, es una meta, una proeza y una tranquilidad saber que, cuentan dos veces al día con ese tazón de arroz. Los banquetes de 20 platos, son para los invitados y para la camarilla que gobierna. (Ahora han reducido la población (¡?) no me lo creo mucho pero, eso dicen ellos) Volvamos a nuestras visitas, mi padre, vio la instalación de la comuna y todo lo que ellos esperaban de esa decisión. Cuando nosotros, mi esposo (QEPD) y yo llegamos a Pekin 1976, nos llevaron a visitar una floreciente comuna. No hablamos chino, de manera que oímos lo que decían los comuneros de boca del intérprete. ¡AH ¡ pero qué cara la de nuestros anfitriones, y ni hablar de los traductores, parecían enfurecidos a medida que hablaban, sus gestos no se compadecían con las palabras que expresaban.  Como profesora de Teoría de la Comunicación y muy estudiosa de la Kinésica (Lenguaje del Cuerpo) y la Proxémica, (Significado del territorio), hice de inmediato un análisis de las divergencias entre lo que decían y la postura de su cuerpo. Llegué al extremo de la confusión, cuando una señora empezó a hablar y terminó llorando. El amigo que servía de intérprete no nos supo dar una explicación coherente de lo que veíamos. Salimos apesadumbrados y cabizbajos de la visita a la Comuna Popular y bastante convencidos de que todo era una gran farsa. Cuando regresamos en 1979, muerto Mao, acabada la Banda de los Cuatro, no había rastro de comunas. Preguntamos, así nos contestaron: “¡Puag, no sirvieron para nada! -dijeron los interpretes-, nos arruinaron, solo dejaron hambre y desolación” Fue de las primeras medidas que impulsaron el gran avance de China en el planeta: eliminar las comunas. ¿Y eso es lo que quieren implantar aquí? Volveré sobre el tema.

Del salto atrás para adelante (II)

No se contradictorios lectores si habrán leído mi artículo anterior; he narrando mis vivencias en la China de Mao sobre las comunas, el gran salto atrás, (así lo denomino) y los desastres de la revolución cultural. He escrito mucho al respecto, al punto de que, me suena como si estuviera repitiendo un mantra. Tenemos que recordar: China le disputa a los Estados Unidos el liderazgo económico mundial, justo después de que dejaran la ideología de Mao. Sin embargo, a pesar de la reiteración, escribo pensando en el Maestro Kotepa Delgado:”escribe, que algo queda” decía, y además reconociendo cómo estamos de mal en nuestro país. Lo que pretenden hacer –las comunas- es todavía mucho más terrible. (Siempre se puede estar peor)Los y que revolucionarios en Venezuela, (los verdaderos, los serios: o murieron o, están callados por cuanto no se atreven a decir estas verdades) mientras yo, recuérdese, vengo “De Regreso de la Revolución”. Después de eso, me permito decir, cualquier cosa, con relación a este tema. En 1979, los amigos y colegas de la agencia Sinjua de noticias (Nueva China, su nombre), siempre en deuda con Adolfo Herrera Espinal, quien había sido corresponsal de ellos durante casi 7 años, prácticamente gratis, nos volvieron a invitar a China. No éramos los ingenuos que habíamos aterrizado tres años antes en el aéreo puerto de Pekín. Íbamos  alerta y dispuestos a no aceptar medias verdades, ni a que nos atragantaran de comida y mentiras. Así lo primero que nos dijeron, seguros de que, nosotros ya sabíamos muchas cosas fue: “La revolución cultural es capítulo cerrado, fue un fracaso y causó demasiadas muertes físicas además de espirituales”. Lo segundo que informaron fue: Se eliminaron las comunas.” Al hacer un balance”(EL PCCH) se dio cuenta de que, eran un fracaso y, como consecuencia, se produjo una enorme hambruna en el país resultado de esa forma de distribución y organización de los alimentos”. La tercera información de impacto, fue: “se clausuraron y cerraron para siempre las Escuelas 7 de mayo”. Las conocimos bien, las visitamos y oímos las confesiones de los supuestos burgueses, terratenientes, campesinos ricos, revisionistas y reaccionarios, explicando sus pecados: alguien que quería leer literatura occidental, otro que le gustaba la buena mesa y el vino, otra que no quería realizar las tareas infames que les obligaban a hacer en la escuela, entre otros aspectos. Aquello que nos contaron en el sitio fue horrendo, todo era de terror. Salimos con los pelos de punta.(1976) Sin embargo, en este momento, la alegría de nuestros anfitriones, quienes en su oportunidad tuvieron que hacer labores allí, era incontrolable y notoria. Impresionante y sorprendente como disfrutaban dando esa información noticiosa: la eliminación de las tales escuelas y, finalmente, como especie de postre, la información noticiosa, -que ya sabíamos- la prisión de la Banda de Los Cuatro, encabezada por la esposa, (la 4ta. De Mao) Chiang Ching. Observamos y vimos muchas cosas en ese viaje, lo que incluyó el viaje al Tibet, siendo Adolfo y yo, los primeros venezolanos en ir hasta allá. Antes, el Presidente Echeverría de México, fue el primer latinoamericano. Nuestro impacto fue inenarrable en aquellos momentos. Por las noches, hablábamos hasta la madrugada, dándonos cuenta de que todo era y es una gran mentira. ¿Gran salto adelante? Si como no, será gran salto atrás. Las comunas, un desastre que ocasionó hambre y miseria. El comunismo no sirve, el socialismo del siglo XXI tampoco y, el real menos. ¡Viva la democracia y la libertad!

 

Compartir

No hay comentarios:

Publicar un comentario